Wilfredo Iraheta "El doctor "Sanabria

Wilfredo Iraheta Sanabria (nacido el 22 de febrero 1967 en Sensuntepeque, El Salvador) es un ex futbolista salvadoreño (fútbol). Su posición es Defensa.

Carrera como jugador

Jugador de Club deportivo Atlético Marte en las temporadas de 1991,1992,1993,1994,

Wilfredo Iraheta ha tenido una carrera larga y maravillosa carrera en jugar en El Salvador. Wilfredo Iraheta fue defensor robusto cuya fuerza en juego aereo y la lucha hizo un éxito ganando un lugar en la selección nacional.

Wilfredo ha sido etiquetado como un gran defensor en el que nunca falto un  torneo,siempre jugando con enorme orgullo y honor.

En 2001 se retiró del fútbol, tanto nacionales e internacionales dando fin  a una carrera maravillosa.

¿Cuándo diste el salto al fútbol profesional?

Me gradué de bachiller en el instituto de Sensuntepeque y por cuestiones de la guerra me vine a estudiar a San Salvador. Me metí a la universidad y quería ser médico porque en los pueblos, en esa época…

¿Y el fútbol?

Empecé a jugarlo a los 15 años, en la liga de ascenso, en el Sensuntepeque. Cuando la liga de ascenso era una liga bastante fuerte. Ganaba 20 colones por partido… pero sí nos los pagaban. Se hacía honor a ese compromiso.

¿Del Marte?

Sí. En Marte jugué cuatro años. Aprovechando eso, hice mi año social, cumplí con mi tesis y me interese por el fútbol. Luego de graduarme me fui a San Miguel.

¿Qué te hizo interesarte por el fútbol?

Me empilé. Ya había cumplido mi máxima aspiración de ser médico, graduarme y todo –aunque no terminaba ahí-, me empilé.

Te casaste, tenés tres hijas… ¿de dónde sacaste tiempo para eso?

En el 93 conocí a mi esposa en una clase de portugués. Me quería ir para Brasil porque o quería estudiar ortopedia o ser gastroenterólogo. Investigué en la embajada de Brasil para aplicar a una beca, había chance, pero debí aprender el idioma. Paty llegó sólo como una semana y se me perdió. Yo dije, juego dos años, preparo mi tesis, aprendo portugués y me voy. Aprendí portugués, conocí a Paty y me quedé jajaja. En el 95 nos casamos.

Le salió jogo bonito, pues.

Me salió el jogo bonito.

(El doctor pronuncia un par de palabras en portugués y termina diciendo, siempre en esa lengua, que se le han olvidado muchas cosas porque no tiene con quién practicar).

Cuando decidí salirme del fútbol en 1999 me quedé sin nada, como se quedan muchos jugadores de fútbol. Termina tu carrera y no tenés asegurado el futuro. Yo más o menos lo tenía asegurado, digo yo, porque tenía mi título, pero eso no garantiza nada. Había conseguido cuatro horitas hasta mayo del año 2000, con el Ministerio de Salud, pero hasta ahí. Por suerte ya me había hecho de mi casa, algunos bienes por ahí. Pero fueron cuatro meses bien difíciles; hasta que conseguí un chance fijo en el Ministerio de Salud.

Si no hubiera estudiado, sacado su carrera, ¿qué cree que hubiera hecho al terminar su ciclo deportivo?

Creo que estuviera en Estados Unidos. El futbolista en el país generalmente tiene tres caminos después de que se retira del fútbol, o lo retiran. Primero, seguir dentro de fútbol como entrenador: algunos siguen y tiene la suerte de seguir y ganar algún espacio.

Cuál es la diferencia entre un jugador salvadoreño con los jugadores del resto del mundo?

La diferencia de los grandes jugadores con nosotros creo que es el sueño que ellos tienen y las metas que se ponen. Hace dos o tres años, Ronaldhino no era el de hoy, pero su promotor, que es su hermano, ya hablaba que se habían proyectado hacer de Ronaldhino el mejor jugador del mundo en dos años. En menos tiempo ya lo era. En Argentina igual. La aspiración de los jóvenes ya no es jugar en el River o el Boca; es irse a Europa. Y nosotros tenemos una visión tan estrecha... y ahí me incluyo.

La aspiración es jugar en los equipos grandes...

De acá y luego ir a la selección. Yo, por ejemplo, hice ese análisis hasta que ya estaba demasiado viejo. Y Milován me lo dijo: tú no estás en otra parte porque muy viejo llegaste a la selección. Si yo me encontrara una lámpara en la calle y el genio saliera y me dijera que me cumple un deseo, ¿qué crees que pediría?

No sé.

Tener 15 años y ser futbolista.

Con la experiencia que tenés ahora.

Sí, ser futbolista y dedicarme como se dedican esos cabrones. A vivir fútbol, a soñar fútbol, a comer fútbol y a descansar.

¿Por eso no salen cracks?

Porque no hay esa aspiración y no nos damos cuenta adónde nos puede llevar el fútbol.

¿Cuál es el mejor jugador salvadoreño hoy por hoy?

Depende del puesto, pero el jugador que más alegría le está dando al fútbol es Cheyo Quintanilla.

¿Y de todos los tiempos?

¡El Mágico!